En nuestra visita a Granja 7 Hermanos en Crespo, Entre Ríos, tuvimos la oportunidad de conversar con el MV Eduardo Godano, responsable del proyecto Gallina Feliz. Godano nos explicó en detalle el proceso de recría, un componente fundamental para la producción de huevos libres de jaula bajo estrictas normas de bienestar animal.
Un comienzo natural
Eduardo Godano nos recibió en el galpón de recría, donde nos explicó que allí es donde todo comienza. “Recibimos pollitas bebé de un día y las llevamos hasta las 14-15 semanas, momento en que se trasladan al galpón de postura”, explicó Godano. Este galpón se diferencia de los tradicionales porque, aunque las pollitas comienzan en jaulas cerradas, el espacio se va transformando gradualmente hasta permitirles moverse libremente, aprender a volar y adaptarse a los distintos niveles que encontrarán en su entorno definitivo de postura.
Capacidades y certificación
En el galpón de recría, Granja 7 Hermanos alberga actualmente alrededor de 33.500 gallinas, cuya genética es Hy-Line Brown. “Esta genética nos ha dado resultados óptimos, llegando a un huevo por día por gallina”, comentó Godano. La cría de estas aves se realiza siguiendo estrictamente las normas de bienestar animal, certificadas por Certified Humane, una organización estadounidense con sede en Brasil que audita anualmente la granja.
“Tenemos que cumplir con especificaciones detalladas, como la densidad de aves, cantidad de comederos, espacio de perchas y horas de luz. Todo está cuidadosamente planificado para asegurar que las gallinas tengan un entorno adecuado”, explicó Godano.
Bienestar animal y manejo
Una de las características más notables del galpón de recría es la tranquilidad de las gallinas. “Se domestican en este ambiente, lo que facilita las maniobras de vacunación y pesaje sin problemas”, afirmó Godano. El sistema de iluminación es crucial, simulando amaneceres y atardeceres para ayudar a las aves a establecer sus rutinas. Al anochecer, las gallinas se dirigen automáticamente a sus sistemas de perchas, que se cierran para mantenerlas contenidas y facilitar el manejo al día siguiente.
Alimentación adaptada
En cuanto a la alimentación, Godano destacó que los comederos en el galpón de recría son idénticos a los del galpón de postura, utilizando un sistema de cadena que enseña a las pollitas a subir a diferentes niveles para alimentarse. “Esta consistencia en el sistema de alimentación asegura una transición suave cuando las aves se trasladan a su alojamiento definitivo”, explicó.
Compromiso con la excelencia
El proyecto Gallina Feliz de Granja 7 Hermanos es un testimonio del compromiso con la excelencia y el bienestar animal. Desde la recría hasta la producción, cada paso se realiza con una atención meticulosa a las necesidades de las aves y a las expectativas de los mercados que valoran la producción ética.
Con la segunda generación de la familia Eberle ya incorporándose al negocio, y una creciente demanda de productos de bienestar animal, Granja 7 Hermanos se posiciona como un líder en la industria avícola argentina. La entrevista con Eduardo Godano resalta la importancia de la recría en este modelo de producción, demostrando cómo la innovación y el respeto por los animales pueden ir de la mano para ofrecer productos de alta calidad.
Nuestra próxima parada en este recorrido nos llevará a explorar más a fondo los galpones de postura, donde las gallinas continúan su ciclo productivo en un entorno libre de jaulas y lleno de cuidados.