Con un Producto Interno Bruto (PIB) de aproximadamente US$ 450 billones, Argentina es una de las economías más grandes de América Latina. Argentina tiene abundantes recursos naturales en energía y agricultura.
En su territorio de 2,8 millones de kilómetros cuadrados, el país tiene tierras agrícolas extraordinariamente fértiles, cuenta con importantes reservas de gas y litio, y tiene un enorme potencial en energías renovables. Argentina, además, es un país líder en producción de alimentos, con industrias de gran escala en los sectores de agricultura y ganadería vacuna. Asimismo, Argentina tiene grandes oportunidades en algunos subsectores de manufacturas y en el sector de servicios innovadores de alta tecnología.
Sin embargo, la volatilidad histórica del crecimiento económico y la acumulación de obstáculos institucionales han impedido el desarrollo del país. La pobreza urbana sigue siendo elevada y alcanza el 35,5% de la población, mientras que la pobreza infantil (niños menores de 14 años) sube al 52,3%.
Para hacer frente a esta situación, se ha priorizado el gasto social a través de diversos programas, entre los que se destaca la Asignación Universal por Hijo, un programa de transferencias que alcanza a aproximadamente 4 millones de niños y adolescentes hasta 18 años, el 9,3% de la población del país.
Las turbulencias financieras del 2018 impactaron en el país e implicaron la revisión del plan económico y la necesidad de contar con un programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El mismo comenzó en 2018, por unos US$ 57.000 millones, con el objetivo principal de estabilizar las cuentas públicas para alcanzar un equilibrio fiscal primario a fines de 2019.
Sin embargo, una nueva ronda de volatilidad macroeconómica desatada en el mes de agosto de 2019 puso en suspenso este programa, y el país ha iniciado un proceso de renegociación de su deuda con acreedores privados. La situación económica presenta equilibrios precarios.
El peso argentino ha perdido 68% de su valor desde abril de 2018. La inflación anual es superior al 50% y luego de una caída de 2,5% del PIB en 2018, la economía se contrajo un 2,2% adicional en 2019. En el mientras tanto, 42 entidades vinculadas con la agroindustria conformaron el Consejo Agroindustrial Argentino y presentaron la “Estrategia de Reactivación Agroindustrial Exportadora, Inclusiva, Sustentable y Federal” que propone como objetivo un aumento de las exportaciones anuales (+16 mil millones de dólares), en el movimiento económico de todo el país (+32 mil millones de dólares), en el empleo distribuido en todo el país (+210 mil empleos directos y cerca de 700 mil indirectos).
Esta reactivación se propone con un impacto fiscal neutro, sin solicitar al Gobierno ningún tipo de subsidio, llevándose a cabo de forma sustentable, cuidando el ambiente con prácticas y procesos que no impacten en el ecosistema. Una vez más, la Agroindustria aporta propuestas, además de consolidarse como el motor productivo de nuestro país.
Autor: Adalberto Rossi