Las dos cámaras que nuclean a la producción avícola, CEPA y CAPIA, presentaron un pedido al Ministro de Economía, Sergio Massa. Según trascendió, hoy se anunciaría una partida de fondos para indemnizar a aquellos productores que tuvieron que sacrificar aves por Influenza Aviar. Algo que los productores venían pidiendo desde antes de que ingrese la enfermedad al país. “Esto va a cambiar el ángulo de la discusión entre vacuna sí o no como así también las medidas de bioseguridad que se están implementando”, indicó Roberto Domenech, titular del Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA).
Según trascendió, hoy se anunciaría una partida de fondos para indemnizar a aquellos productores que tuvieron que sacrificar aves por Influenza Aviar.
Al respecto, el dirigente dijo que “existe una discrepancia con CAPIA respecto de la aplicación de la vacuna que, si bien todos consideramos que es la manera de contener y eliminar este flagelo, lo que hay hasta el momento en términos generales no es lo que uno esperaría de una vacuna”. En este sentido, aclaró que “por lo que nos van explicando, son pocos los países que vacunan, que no son los que más exportan, o que compraron la vacuna en forma preventiva, como Ecuador, Bolivia y Uruguay. El que más historia tiene en vacunación es México, que lo hace desde 1996 de manera permanente”. En este sentido, Domenech explicó que “las vacunas que hay hasta el momento no generan inmunidad, simplemente van atenuando en parte la mortandad, pero manteniendo en plena actividad el virus. Todo esto para un país como Argentina, que pretende seguir exportando y que tiene las condiciones naturales para exportar, no sería lo indicado.”
Según explicó Domenech, “si se vacuna, hay países que no compran, es como que abandonaste la lucha contra la enfermedad” y aclaró que “aquellos que vacunan pierden momentáneamente la condición de exportadores. Hay que ver cómo se desarrolla comercialmente el mundo”.
Luego, el titular de CEPA insistió en que es imprescindible reforzar las medidas de bioseguridad para que no ingrese el virus a las granjas. “Hay casos concretos de granjas que están ubicadas dentro del radio de los 3.000 metros de un foco, han extremado al máximo las condiciones de bioseguridad y llevan 60 días sin casos positivos”, relató. “Extremando las medidas de bioseguridad es más difícil que entre la enfermedad”, recalcó. “Esto es todo nuevo y lo vamos descubriendo a medida que va avanzando. Dentro de un contexto de 170 millones de animales vivos en producción (pollos y ponedoras) en un universo de más de 5.500 granjas en actividad, que haya 14 granjas positivas hasta el momento, es mínimo. Obviamente que, para quien le tocó, es dramático”.