Carlos Castagnani revela un sector agropecuario que sigue esperando medidas concretas que reflejen el compromiso del gobierno con su desarrollo. La disposición al diálogo es vista como positiva, pero la necesidad de acciones inmediatas es imperativa para mantener la confianza y asegurar el crecimiento sostenible del sector. La reunión con el ministro de Economía fue un primer paso, pero queda mucho por hacer para que el campo argentino reciba el apoyo que necesita y merece.
La reciente reunión esta semana entre la Mesa de Enlace y el ministro de Economía, Luis Caputo, marcó un momento crucial para el sector agropecuario argentino. Carlos Castagnani, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), explicó en una entrevista con Adalberto Rossi en “Cátedra Avícola & Agropecuaria” los temas discutidos y las expectativas del sector frente a las políticas del gobierno.
Castagnani comenzó la entrevista destacando la importancia de la reunión y la apertura del ministro para mantener un diálogo fluido con el sector. “Fue una reunión de más de una hora, donde pudimos expresar las necesidades y perspectivas de los productores”, comentó. Aunque no se profundizó en todos los temas, la disposición del ministro para continuar con estas reuniones fue vista como un paso positivo.
Uno de los puntos clave de la reunión fue la política de retenciones. Castagnani señaló que, a pesar de las promesas de campaña, no se ha anunciado una reducción de las retenciones. “Necesitamos medidas concretas que reflejen el compromiso del gobierno con el sector”, afirmó. La falta de anuncios específicos genera incertidumbre entre los productores, quienes ven en las retenciones un obstáculo significativo para su desarrollo.
El impacto de la brecha cambiaria y el dólar blend también fue un tema central. Castagnani explicó que esta situación complica la comercialización de granos, ya que los exportadores liquidan a un dólar oficial mientras que el dólar de exportación es el dólar blend. “Esto resulta en una merma en el valor recibido por los productores”, explicó, subrayando la necesidad de un ajuste que refleje el verdadero valor de exportación.
La presión impositiva fue otro aspecto destacado en la conversación. Castagnani enfatizó que la carga fiscal actual limita la capacidad de inversión del sector. “La presión impositiva de más de 20 años impide el desarrollo suficiente del sector agropecuario”, afirmó. Esta situación se ve agravada por la inflación y la devaluación, que aumentan los costos de producción y dificultan la planificación a largo plazo.
La reunión también abordó la situación de los insumos agrícolas y el impacto del impuesto PAIS. Castagnani señaló que este impuesto incrementa significativamente los costos de importación, afectando directamente a los productores. La eliminación de este impuesto, según Castagnani, podría aliviar parte de la carga financiera y mejorar la ecuación económica del sector.
El presidente de CRA expresó su preocupación por la falta de medidas inmediatas que demuestren un apoyo tangible al sector. “Nos piden paciencia, pero necesitamos mensajes concretos”, dijo. A pesar de la disposición del gobierno para dialogar, los productores requieren acciones claras que respalden su desarrollo y competitividad.
La confianza en el gobierno, aunque ha crecido en algunos sectores, sigue siendo frágil. Castagnani destacó que, aunque los productores han apoyado el proyecto actual, la paciencia tiene un límite. “El tiempo que manejamos nosotros no es el mismo que maneja el gobierno”, afirmó, resaltando la urgencia de medidas que atiendan las necesidades inmediatas del sector.
La conversación también tocó la importancia del desarrollo federal y la necesidad de políticas que impulsen el crecimiento en todas las regiones del país. Castagnani subrayó que el sector agropecuario es fundamental para la economía argentina y que su desarrollo puede generar empleo, divisas y arraigo en las comunidades rurales.
En cuanto a las expectativas de futuras reuniones, Castagnani expresó su esperanza de que el gobierno utilice las herramientas recientemente aprobadas, como la ley base y el pacto de mayo, para implementar las políticas prometidas. “Ahora el gobierno tiene la oportunidad de desplegar las políticas que prometió al sector”, afirmó, sugiriendo que el sector exigirá más celeridad en la implementación de estas medidas.