Finalizamos nuestro recorrido por los distintos centros de investigación y producción de Biofarma visitando el Centro de Experimentación y Nutrición Animal de Biofarma (CENAB) de cerdos. El responsable de operaciones del área experimental, Juan Greslebin, nos lleva en un recorrido por este centro de investigación y desarrollo para revelar su potencial genético y tecnológico.
El CENAB de Biofarma es mucho más que una granja comercial. Con 1250 madres y dos galpones experimentales dedicados a la recría y el engorde, este centro ofrece un entorno único para la investigación y la prueba de nuevos productos y tecnologías. Los dos galpones experimentales están diseñados específicamente para optimizar la investigación, con instalaciones que permiten un monitoreo preciso y un mínimo estrés para los animales.
Dentro del galpón de recría experimental, Greslebin nos muestra cómo se lleva a cabo el proceso de alimentación y seguimiento de los cerdos. Con 24 corrales diseñados para 10 a 12 animales cada uno, este espacio permite un control detallado del crecimiento y la alimentación de los cerdos. Mediante el pesaje semanal de los animales y el seguimiento del consumo de alimento, se recopilan datos precisos que permiten construir curvas de crecimiento y optimizar la dieta de manera individualizada.
Una vez que los cerdos alcanzan cierto peso, son trasladados al galpón de engorde experimental, donde se encuentran dos máquinas de alimentación equipadas con chips electrónicos. Estas máquinas permiten un control preciso del consumo de alimento de cada animal, registrando datos como la cantidad de alimento consumido, la frecuencia de alimentación y los horarios de alimentación. Esta información es esencial para ajustar la dieta y el manejo de los animales de manera óptima.
Además del seguimiento individualizado de los cerdos, el galpón de engorde experimental también cuenta con un proceso llamado “despunte”, donde los cerdos más grandes son retirados de cada corral para permitir que los demás continúen creciendo sin restricciones. Estas prácticas de manejo aseguran un crecimiento uniforme y saludable de los animales, maximizando su potencial genético.
La tecnología y la innovación en el CENAB de Biofarma no solo benefician a la empresa, sino que también tienen un impacto positivo en toda la industria porcina argentina. Al ofrecer capacitación, experimentación y desarrollo, Biofarma se posiciona como un líder en el sector, impulsando el crecimiento y la sostenibilidad de la producción porcina en el país.