Hay varios ítems a tener en cuenta para la avicultura del futuro, tanto a nivel mundial como local. Entre ellos están la mano de obra, el bienestar animal, la sustentabilidad y el desarrollo de nichos o marketing, cuenta Sebastian Noguera, Gerente de Cabaña Modelo.
En cuanto a la mano de obra, el experto dijo que “el tipo de personal que conseguís hoy no es el mismo que hace 10 años. Hace falta mano de obra calificada y gente comprometida con la empresa que te capacita. Esto es un tema mundial, no solo de Argentina. Es un problema generacional. Los más jóvenes no quieren quedarse en el campo”. “Debe haber reglas laborales más flexibles para los jóvenes: mejor conectividad, jornadas más reducidas o con home office, hay que pensar en otras alternativas”, agregó.
Respecto del bienestar animal, Noguera divide al mercado en citadino y “el resto del público”, a quienes no le importan las condiciones de bienestar animal si lo que consume está en buenas condiciones. Sin embargo, alerta que “ya los productores están presionados por este ítem, en temas como por ejemplo la superficie destinada a producción, los tratamientos y el replume, que es un tema muy recurrente…”. Así también, destacó que el “sexar vía innovo y otros métodos similares ya están utilizándose junto a otras normas europeas. Las condiciones de manejo tienden a ser más ‘animal friendly’”, indicó.
Por su parte, la sustentabilidad “se basa en procesos virtuosos como por ejemplo producir con energía solar o reconvertir los residuos en energía, alternativas para que haya menos desperdicios secundarios… Podemos dar el ejemplo como país y creo que estamos capacitados para eso”, aseguró.
El último y cuarto ítem clave para la avicultura del futuro está atado a la sustentabilidad y el bienestar animal: desarrollo consciente de los nichos. “De a poco van a haber más productores que elijan formas de producción que exacerben el bienestar animal y que integren energías alternativas y procesamientos de residuos y, a su vez, que eso esté incluído en el marketing, es decir que el consumidor pague un poco más por ese esfuerzo productivo. La avicultura está preparada para eso y hay muchos productores que están capacitados para eso”, aseguró .