La entrada en vigencia de un dólar diferencial para las exportaciones del cultivo que se utiliza como alimento para vacas, cerdos y pollos sacó de su letargo a los valores del sector. Esperan más aumentos en octubre.
Fue una disparada y se concentró en muy poco tiempo. El Mercado de Cañuelas, que tomó el lugar que antes ocupaba el de Liniers, fue el primero en experimentarlo. Tras meses de precios de la hacienda deprimidos por la sequía, que fuerza a sacrificar animales antes de terminar de engordarlos, los valores dieron un salto.
Según referentes del sector privado, el aumento en el precio al consumidor se ubicará alrededor del 20% tras los saltos en los valores de la hacienda que se registraron entre el viernes de la semana pasada y hoy, y podrían seguir subiendo en los próximos meses como consecuencia de un reacomodamiento ante el atraso que muestra el producto en el mostrador.
“El aumento ya está. Fue de un 20% el viernes y hoy ya se afirmó”, dijo el presidente de la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (CAMYA), Sergio Pedace, quien remarcó que el salto “es en realidad una recomposición de precios, porque estamos atrasados. Esta recomposición del 20% es del 2022 y todavía seguimos atrasados entre un 40% y 50%”.
Según Pedace, este aumento, que fue de entre $100 y $120 por kilo en la hacienda, “se traslada directo a góndola. En las carnicerías se va a estar viendo a partir de hoy en adelante. Van a ser $300 pesos mínimo por kilo”.
“El aumento ya está. Fue de un 20% el viernes y hoy ya se afirmó” (Pedace)
Para el dirigente empresario, este incremento “fue motivado por la incertidumbre y el problema del maíz”, haciendo referencia a la inclusión del cereal en el “dólar agro”, que establece un tipo de cambio diferencial de $340 por dólar para el grano amarillo. “Eso fue un golpe directo, porque el maíz es un componente elemental e indispensable en la producción de carne, tanto para la hacienda, los pollos, el cerdo, la lechería. No puede faltar ese alimento en los feedlots. Con este aumento en los corrales están perdiendo plata”.
Se trató de un fogonazo. En apenas un par de jornadas, los precios dieron el salto y sorprendieron hasta a los propios operadores de Cañuelas. Por ejemplo el precio promedio del novillito, categoría de consumo interno, pasó de $516,41 por kilo el miércoles de la semana pasada a $631,12 en la jornada de hoy en el Mercado Agroganadero de Cañuelas, mientras que el novillo pasó $495 a $619,5 y la vaca hizo lo propio de $348 a $421.
Cabe recordar que en junio la carne sólo aumentó 1,5% respecto a mayo, mientras que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) alcanzó el 6%, según mediciones del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA). Pero el atraso más considerable se puede observar en la comparación interanual, donde el alimento se encareció un 71,3%, mientras que la inflación general fue de 115 por ciento.
“Es una recomposición necesaria, más allá de que el maíz apuró los tiempos, porque estamos atrasadisimos con los precios. La carne sigue siendo lo más barato en Argentina. Estamos consumiendo 50 kilos per cápita y con este pequeño reacomodamiento vamos a seguir igual. Hoy un kilo de helado sale $3.000 pesos, y el kilo de carne no puede estar por debajo”, concluyó.
Por su parte, el vicepresidente de la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales (Fifra), Daniel Urcía, “la ganadería tiene un atraso que venimos viendo y constatando hace una par de meses y el dólar maíz le puso un aditivo más a esta difícil situación. Vimos una recomposición de precios el viernes pasado y hay que ver qué ocurre hoy si se consolida o hay algún retroceso”.
No obstante, para Urcía “hay oferta suficiente de hacienda todavía y la recomposición final de precios la vamos a ver entrando en la primavera. Hay que ver cómo se estaciona esto, si fue piso o techo de recomposición momentáneo. Hay que tomarse una semana para saber qué ocurrió, pero no creo que este sea un ajuste definitivo en el precio. Eso lo vamos a ver en la primavera. Tiene que recuperar el precio y va a ser un salto grande en los valores.
En la misma línea, Pedace vaticinó que “para octubre pensamos que va a faltar hacienda y ahí vamos a tener otro problema. Está faltando novillo pesado por la sequía y el precio de la vaca, con la incertidumbre del dólar, está carísima y eso va a hacer subir los precios. En octubre vemos otro salto”.
Feedlots
La Cámara Argentina de Feedlots (CAM) fue sumamente crítica de la puesta en marcha del “dólar maíz” y anticipó el impacto que podía tener en el sector cárnico. “Sabemos por experiencia que la intervención con cotizaciones diferenciales modifican los costos productivos de todas las actividades que agregan valor a la producción primaria. Ejemplo de ello fue lo sucedido hasta acá con los llamados Dólar Soja I, II y III que no solo modificaron el valor del poroto de la oleaginosa sino también de los demás granos y todos sus subproductos que son de vital importancia en la alimentación de los bovinos para engorde”, dijo la entidad en un comunicado.
En la misma línea marcaron que “demás está decir que todos los programas que intentaron compensar o evitar que para el consumo interno se genere un impacto en el valor de los granos y sus derivados han sido por demás infructuosos, escasos y tardíos” y que “en una nueva edición se aplique ahora un tipo de cambio diferencial a las exportaciones de maíz pone en alerta a todos los engordadores y empresas que generan valor a partir de dicho insumo, no hace más que entorpecer el mercado, encarecer los costos productivos, y desalentar la producción, conllevando a un profundo daño económico a aquellos que continuaron produciendo”.
Fuente: Infobae